Hay días en que la vida te pone en lugares donde tienes que estar, la razón puede que nunca la conozcas y qué más da cuando al final lo único que importa es que hayas disfrutado el momento …
13 de noviembre. Una noche más de Rodautors estaba por iniciar, había más gente de lo habitual, antes de dar las nueve de la noche la sala estaba casi llena, y la razón era que a uno de los cantautores más queridos del proyecto había recibido una buena (muy buena) noticia que había esperado durante años, podrá seguir haciendo música libremente fuera del país que lo vio nacer. No fue una noche normal, se respiraba en el ambiente la alegría y la hermandad, en esta ocasión, a diferencia de otras, el invitado especial de la semana fue quien abrió el concierto: Oye Sebas con el poder del ritmo latino inició la fiesta musical. La comicidad de Pedro Peligro, la alegría desbordante de Luis Tofoles, la sensibilidad de Dàhlia Durán y la compañía de los amigos fueron los ingredientes para disfrutar una noche más de la canción de autor.
15 de noviembre. Por segunda vez en menos de un mes visité el Palau de Sant Jordi, uno de los recintos más imponentes de la ciudad, su inmensidad asusta, pero te hace imaginar todo lo que ha ocurrido dentro de él. Al entrar no lo hice de manera habitual, únicamente tenía la encomienda de capturar con mi cámara algunos momentos del concierto que estaba por iniciar, esa noche Vanesa Martín se presentaba en este enorme escenario. «Fotos durante las dos primeras canciones» era la indicación y así fue, luego sin pensarlo, sólo ocurrió, pasé a ser un espectador más, un seguidor más dentro del mar gente que se congregó para disfrutar de ella y de sus canciones. De a poco recordaba algunos de sus temas, recordaba los que no habían sonado y que me gustaría escuchar, sí, así me convertí en uno más de sus seguidores que disfrutó todo el concierto.
16 de noviembre. Sentir la maravillosa energía de La Maravillosa Orquesta del Alcohol es indescriptible, sólo los que han estado en sus conciertos saben de esas sensaciones. Barcelona lo vivió dos veces este fin de semana, yo presencie una de esas noches, y vi como siete chicos demostraron que con el poder de su música son capaces de desatar la locura en todo aquel que los escucha, durante y después del show. Siete almas que viven y gozan cada una de las canciones, siete artistas que con maestría combinan sus talentos para regalar noches mágicas llenas de calor, así es una de las tantas maneras de describir lo que ocurre en un concierto de La M.O.D.A. pura energía es lo que se vive en estos shows, es un no parar y aunque no lo quieras terminas contagiado de esto, no sabes en qué momento parará, porque a pesar de haber salido de la sala, sigues con la pila recargada por días.
Vivir el momento es lo mejor, si es haciendo lo que te gusta es aún mejor, si no lo es, simplemente disfruta y vive, pues nunca sabrás cuándo esos momentos se volverán a repetir… ¿Qué viviré está semana?
POR: FERNANDO PÉREZ