Viaje extrasesorial con Marwan en El plaza

Por: Minerva López

Por una razón u otra, en mi vida había podido asistir a un concierto completo de Marwan, y creo que la mejor manera de verlo por primera vez en directo fue el pasado 9 de febrero en el plaza condesa, presentando su más reciente álbum “Mis paisajes Interiores”.

Me reí en coro junto a más de mil personas con las anécdotas, y comentarios que hacia Marwan entre sus temas, por demás coreados; a veces estos comentarios iban hilados a las canciones que continuaban y otras para nada, pero la alegría se sentía y se compartía y unía a la multitud con Marwan y su banda.

Las canciones estuvieron llenas de energía, de fuerza y mucha pasión; en la cara del cantautor se veía una alegría indescriptible, en su mirada y sus gestos había asombro, cariño y respeto por aquel público tan gritón que esa noche se reunió en El plaza para vibrar con “Renglones torcidos”, “los restos de esta historia” o “carita de tonto” y básicamente todos los temas que presentó el madrileño. Esa gente ahí reunida se dejó la voz y el alma en cada tema, disfruto cada gesto, cada frase, cada anécdota, se emocionó con cada nota e hizo evidente el gran cariño y respeto por Marwan y por sus temas.

Cuatro momentos significativos que no podré olvidar de este concierto fueron:

Primero, cuándo Marwan se acerco a las vallas para estar cerca de su público y la gente se volvió una marea de manos y teléfonos; después cuando el invitado de la noche Edgar Oceransky fue el suceso más hiperdocumentado, coreado y gritado.

También cuando en “Ya te estoy imaginando” el músico dio paso a su poema homónimo, el cual fue disfrutado por las mil doscientas personas en completo silencio para no perder ni el más mínimo detalle y para que al terminar la gente enloqueciera por completo. 

Y por último cuando cerró el concierto con “Un día de estos” y la gente se convirtió en el coro más entonado, más armónico y el más romántico.

Nunca había ido a un concierto de Marwan y este del plaza se quedará en mi inconsciente de por vida, porque, como él mismo lo dice, sus conciertos son una experiencia completa y probablemente irrepetibles. Y puedo asegurar que este show no solo fue impresionante para mi, fue un hecho memorable para todos los que vivieron ese 9 de febrero junto a Marwan y su banda.

 

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