Cómo serán los directos en la «nueva normalidad»

Por: Minerva López
  • ¿Qué va a ser de la música en directo cuando todo «esto» acabe, cuando la «nueva normalidad» se instale por completo?

Estamos en un buen momento para imaginar miles de futuros posibles, total es 2020, todo puede pasar. 

En el ocio de la cuarentena me puse a meditar qué será de la música en directo cuando todos los semáforos sean verdes y la gente pueda salir al mundo… En Alemania hicieron un concierto que se podía ver desde el automóvil le llamaron drive-in rave en el aparcamiento del Club Index de Schüttorf, con el Dj Devin Wild, al igual que Dinamarca con el músico Mads Langer quien ofreció un concierto a las afueras de Aarhus. Algo limitante para personas sin coche y un tanto absurdo  porque, siendo honesta, un concierto comprende más cosas que ver a una bola de gente tocando instrumentos o consolas sobre un escenario; tiene ciertos rituales, sensaciones olores y colores que, me disculparan algunos, no se pueden comparar con ver algo desde un automóvil (tengo un conflicto parecido con los autocinemas -pero esa es otra historia). 

Por otro lado en España y algunos otros sitios se están empezando a realizar conciertos al aire libre con su respectiva «distancia de seguridad».

Pero imaginemos, dejémonos llevar por la locura de historias futuristas y/o post apocalípticas, cómo serían los conciertos después de la crisis del SARS-CoV-2. Quizá llevaremos trajes especiales para conciertos como «Micrashell» el prototipo que se presentó hace poco, en el cual llevas todo para la supervivencia festivalera, cámara, ventilador, luces led, colores neón y hasta cargador para el teléfono.

También se podría aprovechar la realidad aumentada, la realidad virtual y las cámaras 360; recuerdan que hace algunos años, Vestusta Morla y otros artistas tuvieron iniciativas donde podíamos disfrutar de su música como si estuviéramos en el escenario con ellos.

Tal vez, solo se necesitaría a una persona del staff que transmita el concierto 360 desde una solitaria sala y la gente se conectaría para verlo y vivirlo en directo  con sus respectivos lentes de realidad virtual. Como el cuento de Mikel Izal que habla de un mundo post apocalíptico, donde una parte de la humanidad vive en cuevas subterráneas mientras que otra ha huido del planeta y estos humanos libres le dan experiencias sensoriales y actividades lúdicas a los topos humanos del planeta Tierra. Sería algo parecido, pero ¿Qué sería de los músicos entonces, sin los aplausos y gritos del público?

También, es probable que no cambié mucho y que ahora tengamos que ir a los conciertos con cubrebocas, caretas de «granadero», gel antibacterial y la mayor frialdad posible, quizá se hará slam espiritual o con esferas de Zorbing*. 

En estos momentos creatividad no descansa ¿Y tú, cómo te imaginas los conciertos en la nueva normalidad del mundo?

 

 

 

*Juego neozelandés donde las personas, dentro de una esfera de plástico transparente se lanza colina abajo