El 5 de marzo, luego de varios meses de espera, la Sala Barts en Barcelona acogió la celebración de 10 años del grupo canario Efecto Pasillo.
La cita que tenían pendiente con su público barcelonés al fin pudo ser, la fiesta por su década en la música comenzó pasadas las 8:30 de la noche, cuando las luces se apagaron y saltaron a escena Javi, Arturo, Nau e Iván derrochando energía porque al fin podían retomar su gira de celebración.
El público vivió desde sus butacas el concierto de Efecto Pasillo, se extrañaron los bailes propios de un concierto como este, sin embargo, no fue impedimento para que las manos ondearan por los aires, para que los pies golpearan el suelo y se movieran al ritmo de las canciones.
La fiesta no podía estar completa sin invitados especiales, Carlos Right apareció y junto a Efecto Pasillo interpretaron Cuando me siento bien, un momento especial, y al finalizar la canción, Iván pidió bajaran las luces del recinto con el fin de que los celulares dieran luz, para que «las estrellas del cielo de Barcelona entren», y así las pequeñas linternas inundaron con su brillo para cerrar de manera espectacular este tema.
Las sonrisas que provocan las canciones de los de Gran Canaria se ocultaron tras las mascarillas, pero las miradas de alegría, de gozo se podían percibir en el ambiente; la buena energía que inundaba la Barts contagió a todos, hasta los que sólo iban por compromiso disfrutaron del show.
Cuando todo parecía que llegaba a su fin, la temperatura aumentó, la fiesta llegó a su clímax, Iván presentaba a sus siguientes invitados ¡La Pegatina! Esto desató la locura desmedida del público misma que no paró cuando comenzó a sonar Las Banderas, una canción de fiesta total ideal para esta noche de celebración. La locura con La Pegatina no terminó allí, de manera exclusiva presentaron una canción inédita compuesta por ambas agrupaciones, la cual no ha sido estrenada (y que no saben si algún día se hará) Allí pa’ mí es el título que le dieron y sin duda combina la esencia de ambas bandas.
La fiesta finalizaba, pero Javi, Arturo, Nau e Iván volvían al escenario y lo hacían para cerrar la fiesta en Barcelona con dos canciones, siendo Pan y Mantequilla la cereza en el pastel, esta canción clásica e infaltable en el repertorio dio el cerrojazo a la noche.
Son 10 años de música, 10 años donde la buena energía ha estado presente, 10 años dónde Efecto Pasillo regala shows de calidad, sus conciertos revitalizan el alma y lo ocurrido el viernes 5 de marzo en la Sala Barts de Barcelona es prueba de que la música cura y es el mejor alivio para todos los males.
Texto y fotografías: Fernando Pérez